Fueron necesarios 24 cobros por parte de ambos equipos para conocer al cuadro que avanzaría. Ulises Rivas falló por México y cuando todo parecía terminado, apareció el portero Raúl Gudiño, quien atajó el quinto penal brasileño para mantener la serie de penales.
Ambos porteros cobraron bien sus penales, incluso un lesionado Auro anotó su tiro y después se fue en camilla hasta que apareció de nueva cuenta el arquero mexicano y atajó el segundo disparo de Mosquito que se combinó con el gol de Alex Díaz y sellar el pase a la siguiente ronda.
Fueron los 10 minutos finales del partido donde los goles y el futbol aparecieron. Primero México le puso número a la casa con una buena jugada de pizarrón que Iván Ochoa culminó de buena forma para poner en ventaja al Tri a los 80 minutos, pero la última palabra de Brasil no estaba dicha.
Sólo cinco minutos duró la ventaja de la Selección Mexicana pues a los 85’, Nathan que no había aparecido en el partido contó con la fortuna de tener el rebote de un disparo que él mismo había hecho y así batir la portería mexicana para poner el marcador que mandaría todo a la definición desde los 11 pasos.
El ímpetu y las ganas fueron más que el futbol en los primeros 45 minutos. Brasil tenía la pelota, la intentaba manejar, pero la creatividad simplemente no llegó a ellos en el primer lapso en el que el equipo de Raúl Gutiérrez supo solventar los empates con orden y concentración.
Las más de 20 faltas que se señalaron en sólo el lapso inicial fueron el reflejo de lo trabado y parejo que resultó el encuentro incluso con algunos empujones y reclamos entre Kenedy y Pedro Terán, además de Caio y Ulises Rivas. Nadie quería dar ventaja en ningún aspecto.
Los dos equipos se repartieron la posesión de la pelota y el ritmo del encuentro, pues ninguno supo imponer un verdadero dominio o inquietar la portería rival hasta que los errores aparecieron.
Fue hasta el minuto 37 cuando México encontró la primera de peligro en un contragolpe que Iván Ocho culminó con un disparo dentro del área y que el portero Marcos atajó de gran forma para evitar el primer tanto del partido y la ventaja del conjunto mexicano.
Instantes después el seleccionado azteca le regresó la cortesía a los brasileños cuando el portero Raúl Gudiño metió un despeje deficiente que le dejó el balón a Caio, quien sacó un disparo de fuera del área que se fue apenas arriba de la portería mexicana. Además, Indio había puesto el balón en el travesaño tras un cobro de tiro libre que parecía centro y terminó siendo disparo.
Información por MT
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